Emmanuel de Martonne

Emmanuel de Martonne (Chabris 1873-Sceaux 1955) es una de las figuras dominantes de la geografía francesa de la primera mitad del siglo XX. Discípulo de P. Vidal de la Blache, se conoce en Francia como el fundador de la geografía física general y particularmente como un especialista de geomorfología. Tiene, sin embargo, una carrera que duró cerca de cincuenta años, ejerció una profunda influencia sobre la geografía académica por su enseñanza, su papel en el seno de las instituciones universitarias nacionales e internacionales (especialmente la Unión Geográfica Internacional) y por su abundante obra científica. Después de Rennes (1899-1905) y Lyon (1905-1909), De Martonne es nombrado en la Facultad de Letras de París en la cátedra de Geografía, luego de la jubilación de Vidal de la Blache. Allí forma varias generaciones de estudiantes, dando una gran importancia a las excursiones de «terreno,» a la “«cartografía»” y a los comentarios de cartas o incluso a la representación de los volúmenes de relieve por medio de bloques diagramas. De Martonne contribuye a consolidar la posición institucional de la geografía universitaria en una dirección fiel al proyecto de P. Vidal de la Blache. Él tiene la ambición de fundar la geografía física general por la síntesis de disciplinas separadas (cartografía, morfología, climatología, botánica y zoología). En el plano institucional, logra esta síntesis, de una manera algo paradójica, en el seno de las facultades de letras, cuando esas disciplinas dependían de las facultades de ciencias. Inscribe de hecho la geografía física francesa en un medio universitario literario. A. Cholley (1955) subrayará que la mayor parte de los estudiantes que él forma se orientaron hacia las monografías de geografía descriptiva regional. Consciente de la importancia de ampliar la formación de los alumnos inscritos en facultades de Letras hacia las ciencias naturales, De Martonne insiste para que la geografía de París sea un instituto de universidad y no de facultad.

Su papel en el seno de las instituciones es considerable a lo largo de su carrera: participación en el comité de lectura de los Annales de Geographie, fundación de la Asociación de Geógrafos Franceses (1920), presidencia de la Unión Geográfica Internacional (1935-1952), presidencia de la Sociedad de Geografía (1947-1952). A nivel internacional, su carrera es contemporánea al desplazamiento del polo de excelencia de la geografía mundial, con la declinación de la escuela alemana y la afirmación de la “escuela francesa”. Un número considerable de viajes y de misiones en el extranjero puntúan su carrera y contribuyen a reorganizar la enseñanza de la geografía en numerosos países (Delfosse, 2001). Sabio reconocido, desempeña igualmente un papel importante en la redefinición del trazado de las «fronteras» en Europa central, como experto geógrafo en el seno del Comité de estudios, después de la primera guerra mundial. La obra científica de De Martonne es muy abundante (aproximadamente 150 libros y artículos). De Martonne, titular de un doctorado en letras en 1902 y de un doctorado en ciencias en 1907, posee una producción científica que lo convierte en uno de los primeros –y de los últimos- geógrafos que tienen experiencia en todos los campos de una geografía en pleno desarrollo. Es admitido en la Academia de Ciencias en 1942. De Martonne se interesa por la geografía regional (los Cárpatos y Europa central) y redacta el tomo IV de la Geografía Universal sobre Europa central (dirigida por P. Vidal de la Blache y L. Gallois). Escribe en 1909 un Tratado de Geografía Física, libro de referencia que conocerá al menos nueve reediciones, y que consagra su ambición de hacer una geografía física que reúna la climatología, la biogeografía, la zoología, pero donde el sitio principal (¡un tomo entero!) está dedicado a la geomorfología. A partir de la edición de 1927, De Martonne confía el rediseño del tomo sobre biogeografía a Auguste Chevalier, botánico y especialista en agronomía colonial, y el tomo sobre zoogeografía a Lucien Cuénot, biólogo. Con la colaboración de Lucien Aufrère, pone a punto el índice de aridez y la carta de las regiones privadas de drenaje hacia el océano (endorreísmo). Este trabajo es objeto, entre 1925 y 1928, de siete publicaciones, una de las cuales se hizo en la Geographical Review en 1927. Estos trabajos sobre la aridez circularon ampliamente entre los geógrafos y los no geógrafos. Forman parte de las referencias citadas por los climatólogos estadounidenses (en particular C. W. Thornthwaite) que intentan elaborar una clasificación de los climas más deductiva y menos empírica.

Su concepción de la Geografía proviene, a su vez, de una postura epistemológica “«realista»”. El método geográfico está concebido sin discontinuidad con el objeto de estudio, y sin reconstrucción de éste. Como los otros posvidalianos, De Martonne considera lo real como un dato, independiente del investigador, y directamente utilizable. Esta insistencia en las realidades concretas hace de él, como de Lucien Gallois, uno de los responsables de la ortodoxia clásica en Geografía (Orain, 2001). Docente, organizador y sabio totalmente dedicado a su disciplina, especialmente al crear la agregación en geografía (1943). Contribuyó a dar a la geografía francesa dos rasgos que han tenido una larga persistencia: el peso del análisis geomorfológico y la gran importancia dada a las explicaciones naturalistas.